Aún recuerdo mi primer viaje en moto, realmente no fue un viaje, más bien un salto a la península.
Para mí eso ya fue un gran logro y las cosas desde entonces han cambiado bastante. Las motos por aquel entonces empezaban a ser mucho más fiables que sus antecesoras cosa que minimizaba el riesgo de avería en ruta. Lo que sí ha dado un vuelco espectacular ha sido la equipación. Antes el motero sólo disponía o de la "chupa" de cuero, que no aguantaba más de media hora bajo la lluvia sin empaparse, o del Barbour que se trataba de un tabardo tres cuartos, más bien holgado y con cinturón para ceñirlo a la cintura, hecho de tela de algodón engrasada que soportaba muy bien la lluvia y con bastante buena protección térmica para lo que existía en la época.
Ambas prendas con muy poca protección frente a impactos, pero hay que recordar que no hacía mucho empezó a ser obligatorio el uso del casco y aún había mucha gente reticente al uso de este. No era raro ver a alguien sobre una moto de gran cilindrada con gafas de sol, en bermudas, con cangrejeras y sin nada más, ni casco, ni camiseta y por supuesto sin guantes.
Por suerte todo eso ha cambiado, ha cambiado la conciencia del usuario de la moto. Ahora mucha gente va correctamente equipada, y eso que en España a veces es muy difícil debido a las altas temperaturas que llegamos a sufrir en verano. También han cambiado mucho las prendas habiendo mejorado infinitamente la protección frente a impactos, su capacidad de aislamiento térmico, la ventilación en verano y sobre todo frente a la lluvia. Son prendas técnicas que como tales no son baratas, aún hay gente que le cuesta pagar lo que valen por ellas, pero una vez que lo han hecho son conscientes de lo necesarias que son y una vez probadas es difícil volver atrás.
Todo esto viene al caso por que de cada vez hay más gente que se anima a viajar en moto. Creo que ha ayudado mucho esta evolución en la equipación. Ahora el ir en moto es más confortable, más difícil pasar frío o mojarse, siempre y cuando uno vaya correctamente equipado.
Por todo lo anterior quiero animar a esos moteros indecisos que aún piensan que ir de viaje en moto es una aventura, lleno de riesgos y que no te va a quedar más remedio que sufrir las inclemencias del tiempo. A veces comento que he disfrutado mucho de conducir mi moto bajo la lluvia por carreteras lejanas y mucha gente me tacha de chalado simplemente por que no han ido en moto nunca y no saben de lo que estoy hablando. Un día de lluvia se puede disfrutar por varios motivos, el primero por que el que llueva no quiere decir que te vayas a mojar. Segundo por que te hace estar mucho más en contacto con el entorno, oliendo la humedad y los diferentes olores que podemos percibir frente a los de un día seco. Es agradable la sensación de sentir como llueve y que hace frío pero sin padecerlo. La única pega es que un día así requiere mucha más concentración y los kilómetros no fluyen de la misma forma que un día soleado y con asfalto seco.
Internet en este sentido puede ayudar por que de cada día es más fácil encontrar historias, relatos, blogs y fotos de gente que rompe con todo y decide partir en moto a sitios muy lejanos, sin fecha de vuelta. Quién profundice en toda esa información verá con claridad que se trata de gente normal, sin cualidades sobrehumanas que simplemente deciden que su vida "normal" es aburrida y que con los medios que se disponen actualmente al abasto de cualquiera no son retos imposibles.
Por todo lo anterior animo a la gente indecisa a dar el salto. A probar un viaje aunque sea a pocos cientos kilómetros de casa por que van a comprobar porqué de cada vez hay más gente sobre una moto y con las maletas llenas alejándose de casa.
Es algo que una vez que se prueba "marca" por mucho tiempo.
Carlos Llabrés
IMM Rent and Tours
No hay comentarios:
Publicar un comentario